La política de juventud en Barcelona: una experiencia pionera que trasciende en el tiempo

La política de juventud en Barcelona: una experiencia pionera que trasciende en el tiempo

Recientemente se ha presentado un libro que recoge la experiencia de la política de juventud en Barcelona durante los primeros años de la transición democrática. El evento tuvo lugar en el Espacio Joven La Fontana de Gràcia y contó con la participación de ex concejales y trabajadores del Área de Juventud. Esta obra colectiva busca mostrar cómo Barcelona se convirtió en pionera en la implementación de políticas innovadoras dirigidas a los jóvenes, las cuales han dejado una huella duradera en el conjunto de las políticas públicas de la ciudad.

Uno de los aspectos destacados por los participantes del libro es la gran pluralidad política, cultural y social que existía durante aquellos años. Los jóvenes tenían un peso demográfico significativo, lo que permitió aplicar políticas transgresoras y disruptivas en respuesta a problemas desgarradores. Según Imma Mayol, ex concejala y miembro del grupo promotor del libro, muchas de las ideas y enfoques de aquel entonces siguen siendo relevantes en la actualidad.

Enrique Truñó, ex concejal del Área de Juventud y Deportes, recuerda aquellos años como un período en el que todo estaba por hacer. Con la democracia recién instaurada, creían que era necesario cambiar las cosas y estaban dispuestos a enfrentarse a cualquier desafío. Su objetivo no era simplemente ofrecer servicios, sino facilitar, acompañar y proponer para que los jóvenes pudieran convertirse en ciudadanos activos y comprometidos. Sin embargo, pronto llegó el desencanto, ya que la tasa de desempleo juvenil era alarmantemente alta.

En la presentación del libro, Janet Catalan Guimerà, vicepresidenta del Consejo de la Juventud de Barcelona (CJB), resaltó la importancia de políticas transgresoras que, aunque puedan generar polémica, sean capaces de abordar los problemas actuales de los jóvenes. También hizo un llamado al Ayuntamiento para fortalecer los vínculos entre las asociaciones juveniles y la administración local y así enfrentar los desafíos actuales, como el aumento de los suicidios entre los jóvenes.

Otro aspecto destacado en el libro es el rol del Área de Juventud como una escuela de gestión pública. Jaume Collboni, alcalde de Barcelona, cerró el evento reconociendo el valor de aquellos hombres y mujeres que tenían todo por hacer y que sentaron las bases de una forma innovadora de gestionar las políticas públicas. El Área de Juventud se convirtió en un referente al impulsar la participación ciudadana y la colaboración en la toma de decisiones, lo cual ha sido replicado en otras áreas de la administración. Además, propició el movimiento asociativo y la creación de servicios como las colonias de verano, los planes de empleo juvenil y los centros de información y asesoramiento para los jóvenes.